martes, 16 de agosto de 2011

Presionen tecla "pause".

Allí estaba el negro animal con su pelaje deslumbrante, silueta majestuosa y unos pies bien aferrados a la tierra. Su figura evocaba temor y cuando se volvía de lado menguaba hasta casi desaparecer. El protegido de Baco observaba el camino desde el promontorio; parecía una esfinge muda viendo los coches pasar. Al llevar tantos años esperando había sido indultado por arte y por tortura. Solitario y testigo de estampidas generacionales, este fantasma bravo, alegraba las carreteras de media España en busca de nuestra identidad. 

Toro Osborne de la A-42 (Toledo).


Y aquí la noticia del día:
http://www.publico.es/espana/391618/un-peregrino-corneado-por-una-estatua


No hay comentarios:

Publicar un comentario